Septiembre, el mes más esperado por padres y madres que, como yo, desean recuperar las rutinas tan necesarias para los más peques de la casa. Y es que la rutina diaria es nuestro mejor aliado para recuperar la rutina de cepillado adecuado para cada edad y, por qué no, revisar si lo estamos haciendo bien o no.
Porque son muchos los padres que por desconocimiento no siguen unas pautas adecuadas de higiene entre los más pequeños. Algunos de los mitos que me he encontrado en consulta y que no me canso de desmentir son los siguientes:
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FALSO. Cuando sale el primer diente de leche ya se tiene que empezar a cepillar. Normalmente el primer diente de leche suele salir sobre los 6 meses de edad, en algunos bebés antes y en otros después (en todos los casos está dentro de la normalidad). Los primeros dientes en salir suelen ser los incisivos centrales inferiores, seguidos de los incisivos centrales superiores.
A los 3 años de edad la mayoría de los niños ya suele tener todos sus dientes de leche.
FALSO. El dedal de silicona se aconseja cuando aún no hay ningún diente erupcionado en la boca. Se aconseja utilizar una gasa limpia humedecida con agua para limpiar las encías después de la toma del pecho o del biberón. También si se prefiere a la que empiezan a asomar las puntas de los dientes de leche se puede pasar el dedal de silicona pero una vez el diente lacteal (de leche) ya ha erupcionado se debe cepillar con un cepillo infantil con cerdas suaves y un mango ergonómico.
Y cuando empiezan a erupcionar las muelas (18-24 meses) se recomienda pasar el hilo dental entre las zonas de contacto de éstas cada noche como parte de la rutina.
FALSO. Es muy importante que los niños acudan al dentista durante su primer año de vida para poder detectar cualquier anomalía lo antes posible. Y son necesarias las visitas regulares a partir de los 2 años de edad para poder evitar las caries y tratar las lesiones lo antes posible. Si vemos una radiografía de la boca de un niño se puede observar como los gérmenes de los dientes definitivos se encuentran por debajo de los dientes de leche, así que cualquier infección en los dientes de leche puede llegar a afectar a la dentición definitiva. Además, una infección prolongada puede provocar una pérdida de hueso en el maxilar o la mandíbula.
FALSO. Los zumos naturales están llenos de vitaminas y son muy importantes para el crecimiento de los niños pero los zumos envasados llevan un porcentaje de azúcar altísimo. Tomar muchos zumos envasados puede favorecer la aparición de caries y no está recomendado. Se ha visto que alimentos que contienen entre un 15 y un 20% de azúcares, especialmente la sacarosa, son de los más cariogénicos (más propensión a desarrollar caries), sobretodo tomados entre las comidas.
Se aconseja priorizar el consumo de agua o zumos naturales acabados de exprimir. También se debe evitar endulzar los biberones con azúcar o miel.
Os dejo un enlace de un video de nuestro Colegio de Odontólogos y estomatólogos de Cataluña (COEC), con recomendaciones sencillas para cada etapa de la vida: «Consells per una bona salut bucodental al llarg de la vida«
El dedal de silicona se aconseja cuando aún no hay ningún diente erupcionado en la boca o cuando empiezan a asomar las puntas de los dientes de leche.
Consejo para alargar el tiempo de cepillado: utilizad un reloj de arena para que sepa cuánto tiempo debe cepillarse los dientes
Desde el Colegio de Odontólogos y Estomatólogos se recomienda utilizar pasta fluorada desde la aparición del primer diente.
Pero en consulta me he encontrado con niños pequeños (2-4 años) que no se cepillan los dientes porque no les gusta el sabor de la pasta o por el contrario, que no se cepillan los dientes pero se comen directamente la pasta.
En ambos casos, he aconsejado a los padres que empiecen a cepillar los dientes sin pasta dental o sólo manchando el cepillo con la pasta. Normalmente se aconseja poner la cantidad de un grano de arroz en menores de 3 años y de un guisante a partir de los 3 años de edad hasta los 5. Pero en los casos que está fallando el cepillado, mejor empezar a reforzar primero el hábito del cepillado sin pasta o con menos cantidad de la recomendada.
Cuando el niño esté acostumbrado a cepillarse los dientes de manera correcta cada noche podemos volver a introducir la pasta dental en la cantidad recomendada. También si al niño no le gustan los sabores mentolados se pueden encontrar pastas dentales pediátricas con otros sabores. ¡Os sorprendería la de sabores que existen actualmente!
Muchas veces se aconseja a partir de 6 años porque es la edad en la que erupciona el primer molar definitivo, pero muchos niños tienen una erupción más temprana así que siguiendo las recomendaciones que marca la Sociedad Española de Odontopediatria (SEOP) he preferido poner a partir de los 5 años.
A parte de estas recomendaciones, no olvidéis que lo más importante es un buen cepillado y crear el hábito en los más pequeños. ¡Que siempre sea como un juego para ellos.!